El presidente del Tribunal aborta otro intento de introducir a ETA en el juicio

ABC - Miércoles, 21 de febrero de 2007

No es la primera vez que en las cuatro jornadas celebradas ya de juicio, dos de las acusaciones populares y el letrado José Luis Abascal, defensor de Jamal Zougam y Basel Ghalyoun, aprovechan la mínima ocasión para «colar» en sus interrogatorios alguna vinculación de ETA con los atentados. Y ello, pese a que los dos procesados han negado reiteradamente cualquier relación. Estos intentos han sido abortados en todos los casos por el presidente del Tribunal, Javier Gómez Bermúdez. Ayer fue el abogado Gonzalo Boyé, que defiende a una de las víctimas, el que puso al descubierto la estrategia del letrado Abascal de intentar meter en la vista una prueba que no está recogida en el sumario: una foto de un temporizador que fue incautado a ETA por la Guardia Civil.
Fue en la declaración de Mouhannad Almallah, quien ya había contestado a la Fiscalía, cuando el abogado de una de las acusaciones particulares le preguntó sobre el hallazgo en el piso de la calle Virgen del Coro de un temporizador ST. Su existencia figura en el acta de entrada y registro a este local que consta en el sumario. Boyé preguntaba por este extremo al procesado Almallah por su condición de técnico en reparación de electrodomésticos, por lo que utiliza temporizadores. Su pretensión era ver si el acusado identificaba como suyo el temporizador que figura en el escrito de defensa de Ghalyoun, un artilugio ajeno a esta causa.
Bermúdez rechazó esta solicitud al tratarse de un escrito de la defensa que no forma parte del sumario, aunque sí del Rollo de Sala. Y si el documento no está en el sumario, no se puede someter al principio de contradicción.
En el escrito de la defensa de Ghalyoun, en el que el letrado habla del temporizador que quiere relacionar con el hallado en Virgen del Coro, se señala: «Todos aquellos que investigamos el armamento y explosivo de (...) ETA sabemos que cuando aparece un temporizador ST es de procedencia etarra, descartando a cualquier otro grupo terrorista. ¿Por qué? (...) Este temporizador está marcado por la banda vasca después de manipular otro original (...) A todos los temporizadores manipulados por ETA se les marca con las siglas ST, que significan, como se puede ver en la foto, «Segurtasun Tenporizadorea». Nadie más que ETA usa estos temporizadores marcados con las siglas ST». Debajo de estas líneas aparece la imagen de un temporizador, pero con un detalle que no pasa inadvertido: en la medición del artilugio se lee: «Guardia Civil-Policía Judicial», cuando el registro de Virgen del Coro lo hizo la Policía. Es decir, la fotografía está extraída de otro sumario, de una incautación a ETA.
El intento de la defensa de Zougam y Ghalyoun, en cualquier caso, resulta grotesco, porque el temporizador que apareció en el local es completamente distinto al de la fotografía, pues se trata de uno redondeado utilizado en las lavadoras. Ni siquiera tiene la inscripción «ST 17», sino «STA».
Los intentos de vincular a ETA con el 11-M por parte de esta defensa se producen aun cuando el defendido negó el lunes por activa y por pasiva cualquier relación con la banda. Esto respondió al ser preguntado por su regreso del País Vasco tras trabajar en San Sebastián:
Fiscal: «¿Adquirió algún temporizador allí?».
Ghalyoun: «No».
F: «¿Lo trasladó o hizo que lo trasladaran a Virgen del Coro?».
G: «No».
F: «¿Alguien le dio el temporizador para dejarlo en Virgen del Coro?».
G: «No».
F: «¿Vio usted el temporizador en poder de los que vivieron en Virgen del Coro?».
G: «No, sólo cosas que Mouhannad (Almallah) usaba en su trabajo».
Ya han sido varias las preguntas encaminadas a vincular la banda con el 11-M. La Asociación de Ayuda a las Víctimas o la AVT han preguntado a los procesados por vínculos con ETA. Todos los niegan y algunos, como El Haski, han ido más lejos: «Eso de ETA es como la película de las cucarachas», (en relación con el hallazgo de ácido bórico en su casa).
Ayer, la abogada de Asociación de Ayuda a las Víctimas preguntó a Almallah si conocía a Yusuf Galán, español convertido al Islam, mano derecha de Abu Dahdah, condenado por pertenencia a Al Qaida e interventor en el pasado de HB. Dijo que sí, pero negó cualquier trato. También Bermúdez cortó en seco y no permitió mayor desarrollo de esta vía.